Nuestro planeta es fuerte, sin embargo, también es vulnerable y puede verse afectado por la contaminación, el uso insostenible de los recursos o el cambio climático, donde la acción humana tiene gran parte de responsabilidad.

En el Día Internacional de la Madre Tierra, que se celebra el 22 de abril, desde Promoción Social, conscientes de su importancia, queremos ayudar a crear conciencia social sobre la crisis mundial en la que se encuentra la Tierra y la necesidad de adoptar medidas urgentes por parte de todos para combatirlo.

Es necesario trabajar por la recuperación de los ecosistemas: favorecer la recuperación de aquellos que hayan sido degradados o destruidos y conservar los que todavía siguen intactos.

Y comprometidos con ello, en nuestros proyectos de cooperación integramos acciones que ayuden a las comunidades rurales a optimizar y gestionar de manera adecuada y sostenible sus recursos, contribuyendo a eliminar las presiones que afectan a la naturaleza para que pueda recuperarse por sí sola, a mejorar los medios de subsistencia de las personas que dependen de ellos y a controlar las enfermedades y reducir el riesgo de desastres naturales.

En América Latina, por ejemplo, en la Microcuenca Chipuluc (departamento de Cajamarca, Perú), algunas de las iniciativas son la instalación de sistemas de riego para disminuir en un 50% el uso de agua para los cultivos; cocinas mejoradas, que reduzca en un 50% el consumo de leña mensual en los hogares y, en consecuencia, la contaminación del medio ambiente y la tala de árboles; o módulos de gestión y clasificación de residuos sólidos orgánicos e inorgánicos familiares, que permiten, además, la producción de abonos propios o la comercialización de metales y envases.

Asimismo, se realizan programas de sensibilización en adaptación y mitigación frente al cambio climático o prácticas de conservación del suelo, como la construcción de terrazas o viveros comunales para producir especies forestales nativas.

También en Perú, en la Bahía de Sechura, son necesarias acciones para proteger esta zona rica en recursos pesqueros, pero que está sometida a una fuerte presión, provocando la sobreexplotación de muchas especies.

Para diversificar y mejorar la producción acuícola de forma eficiente, se trabaja en el cultivo integral de la concha de abanico en sistema suspendido, por ser una especie nativa y no representar riesgo ambiental. Además, se capacita sobre buenas prácticas sanitarias en moluscos bivalvos.

Gestionar de forma eficiente los residuos sólidos en el ámbito doméstico y en las caletas también es una prioridad. Para lograrlo se incluyen algunas iniciativas como un programa de capacitación en buenas prácticas ambientales y cuidado y protección del medio ambiente para los maricultores y maricultoras; la conformación de la Red de Emprendedores Ecológicos de Sechura; un plan de gestión ambiental y fomento de la conservación de los recursos naturales marinos; o campañas para la recogida de residuos sólidos. Se incide en la participación de instituciones del sector y en la alianza con el gobierno local.

En Diriamba, Nicaragua, trabajamos en la denominada “economía de patio”, explotación racional de los espacios de tierra alrededor de las viviendas desarrollando pequeñas iniciativas familiares de agricultura. Estos huertos permiten diversificar la producción a través de la capacitación en técnicas de cultivo tradicionales y no tradicionales, sostenibles y respetuosas con el medioambiente.

En Joya Grande, Guatemala, se realizan capacitaciones de producción agropecuaria sobre conservación de suelos, como el uso de microorganismos beneficiosos para el mismo, el buen manejo del agua o la rotación de cultivos para disminuir situaciones negativas de desertificación, y el uso de fertilizantes orgánicos.

También sobre buenas prácticas ambientales, como el manejo correcto de envases de agroquímicos para no contaminar el flujo de agua del hogar y, en consecuencia, de la comunidad, apoyado con carteles informativos.

Además, mediante jornadas médico-nutricionales, se promueve la correcta gestión del agua, métodos de purificación y su uso razonable en la limpieza del hogar y en la higiene personal. Y a través de las visitas domiciliares, se enfatiza en el manejo de los desechos sólidos.