El pasado 3 de enero, la agencia de noticias Rome Reports publicó una entrevista a Macarena Cotelo, Directora de Proyectos de Promoción Social, para tratar la situación actual en Tierra Santa, y cómo puede afectar la decisión del presidente de Estados Unidos de reconocer Jerusalén como la capital de Israel.

“Los conflictos en Tierra Santa empujan a los cristianos locales a irse”

Jerusalén es la Ciudad Santa para las tres grandes religiones del mundo que veneran en ella lugares emblemáticos para su fe. Es un crisol de culturas y una ciudad única con una especial vocación de paz, tal y como asegura el Papa Francisco.

Por eso, preocupa especialmente la decisión del presidente de Estados Unidos de reconocer Jerusalén como la capital de Israel.

Macarena Cotelo, Directora de proyectos, Promoción Social:

– “Va a afectar a todos los palestinos por igual. Yo sí que estoy recibiendo mensajes de cristianos que tienen preocupación por su futuro, pero es la preocupación que llevan arrastrando todos estos años. Hay incertidumbre sobre qué pasará ahora. En ese sentido yo diría que musulmanes y cristianos palestinos comparten un mismo problema y un mismo desafío. Evidentemente esto no ayuda en nada a la convivencia con los judíos porque así se vuelve a mezclar lo político y lo religioso de una forma peligrosa”.

Macarena Cotelo es la directora de proyectos de la Fundación Promoción Social una de las pocas organizaciones que, de forma continua, trabaja desde los años 90 por fomentar la convivencia y reforzar la presencia cristiana en una tierra en la que cada vez es más difícil serlo.

– “El efecto inmediato que tienen los conflictos en Tierra Santa es que empujan a los cristianos a irse. Los palestinos tienen familia fuera y les resulta relativamente fácil, aunque doloroso, volver a irse. Son realmente los que están en la situación más delicada por ser minoría”.

Para impedir esta diáspora, la organización coopera en proyectos educativos y de desarrollo que dan valor a la presencia cristiana entre musulmanes y judíos. Llevan dos décadas promoviendo la creación de escuelas cristianas donde estudian niños de diferentes religiones.

– “Siempre nos ha parecido que era un modelo maravilloso de apoyar porque, por un lado, son espacios de convivencia en paz donde los niños, aprenden a crecer juntos desde pequeñitos. Son musulmanes y cristianos juntos y, al mismo, estos centros refuerzan la presencia cristiana en Tierra Santa”.

Intentan aportar soluciones reales a los problemas entre palestinos y judíos como la cuestión del agua, un punto crítico en el conflicto árabe-israelí, o a la falta de energía en zonas como Gaza donde quedan unos 2.000 cristianos.

– “Todavía quedan cristianos. Hay una parroquia y hay dos colegios del patriarcado latino. Uno antiguo, que ayudamos a rehabilitar y ahora es un complejo que protege, por así decir, a la congregación de las Misioneras de la caridad de Madre Teresa que tienen un pequeño convento para atender a discapacitados y es un área de seguridad para los cristianos; y una escuela más grande que, en alguno de los últimos conflictos, ha sido refugio de familias enteras”.

El trabajo que hace esta fundación sirve para recordar que la paz en Tierra Santa es muy frágil y que cualquier decisión precipitada puede tirar por tierra la delicada labor de quienes sí trabajan por garantizar un futuro de convivencia en la región.

https://www.romereports.com/2018/01/03/los-conflictos-en-tierra-santa-empujan-a-los-cristianos-locales-a-irse/